El Monasterio de Pedralbes es una antigua fundación religiosa de principios del siglo XIV que está situado en uno de los barrios de la ciudad de Barcelona. Hoy, el monasterio es un complejo que se puede visitar que ofrece de manera muy vívida detalles del estilo de vida de los monjes de la Edad Media.
Algo de historia. En 1326, Elisenda de Montcada, cuarta y última esposa del rey Jaime II, ordenó la construcción de un monasterio para las monjas clarisas que llevaban una vida de clausura. El monasterio se edificó en un tiempo muy corto y las monjas claras pudieron mudarse a su nuevo recinto en 1327.
Durante siglos, el monasterio estuvo cerrado a cualquier persona externa, pero en 1972, el Ayuntamiento de Barcelona firmó un acuerdo con la Iglesia para traspasar el Monasterio de Pedralbes a la ciudad para que pudiera ser visitado como museo. A cambio, la ciudad construiría un nuevo convento para las monjas. Tras largos trabajos de restauración, el Monasterio de Pedralbes abrió sus puertas al público en 1983.
El Monasterio de Pedralbes es uno de los edificios de arquitectura gótica mejor conservados de Barcelona. Pero no sólo tiene valor por su arquitectura, en su interior se puede muchos objetos de uso cotidiano que invitan a imaginar cómo era la vida tras las paredes del convento.
La iglesia
La iglesia, dedicada a Santa María, está conectada con el exterior del monasterio. Es una típica iglesia gótica catalana, con una sola nave ancha y un interior muy sobrio.
Tras ingresar en el monasterio propiamente dicho, los visitantes pueden iniciar un recorrido por el soberbio claustro. En su gran patio central, plantado con cipreses, donde incluso se alza una palmera, se puede ver un pozo barroco rodeado de bancos con azulejos de cerámica y una fuente medieval.
Después recorrer el claustro en sentido contrario a las agujas del reloj, la primera sala que ve el visitante es la Capella de Sant Miquel (Capilla de San Miguel), uno de los lugares destacados del monasterio. La sala está decorada con frescos pintados por Ferrer Bassa en 1346.
Muy cerca se encuentra la tumba de Elisenda, que se deja ver vestida con su atuendo real en en lado de la iglesia y con el hábito de monja en el lado del claustro.
Muchas de las estancias del antiguo monasterio están abiertas a los visitantes, incluido el refectorio abovedado, la cocina decorada con azulejos de colores, la enfermería y una serie de celdas de clausura privadas. Muchos de los objetos domésticos utilizados por las monjas todavía están en su sitio, entre ellos, jarrones y utensilios de cocina.
El Dormidor (dormitorio) alberga la colección de obras de arte del monasterio. Entre ellos, una serie de objetos históricos entre los que se cuentan muebles y piezas religiosas como un ejemplar de la Biblia de gran formato. La última sala que se visita es la Sala Capitular cuya vidriera está fechada en 1420.
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Monasterio de Pedralbes
